Y VOS… ¿QUIÉN SOS?
El otro día salí del Correo y, mientras desataba la bicicleta, un pibe subido a la suya frenó a unos metros de mí. Salía de la escuela, llevaba el guardapolvo desabrochado y estaba mandando un audio con el celular. No recuerdo qué estaba diciendo, pero estornudó. No alcanzó a terminar la siguiente palabra que estornudó otra vez. Después de estornudar cuatro veces seguidas largó una carcajada y dijo “te mando este audio igual porque esto también soy yo.”
Él no pudo verme, pero yo también reía.
Después de eso y durante todo este tiempo estuve pensando en qué cosas me hacen también a mí.
Quizás podría contar que no sé atarme bien los cordones o que no entiendo la pasión que tiene la gente por los Beatles. Que hago nuditos con todos los envoltorios y que me gustan los números impares. O podría decir que amo y odio viajar en colectivo.
Que jamás remonté un barrilete y que extraño jugar a las escondidas con mis amigos del barrio. O que la gente cree que leo mucho y no es tan así.
Que pienso todos los días en mis abuelos porque, aunque tres de ellos no están y a veces no sé si Norita realmente se acuerda de mí, no me animo a soltarle la mano a mi infancia. Porque soltar la felicidad provoca eso, terror.
Podría decir que sueño más despierta que dormida y que pido siempre – pero siempre – menta granizada.
Que vi más de 100 veces Esperando la Carroza. Que me parezco más a Louise que a Thelma pero que no sé manejar. Que soy poco impulsiva y que a veces me da vergüenza bailar delante de la gente.
Que me asusta crecer o que volvería a nacer en el mismo lugar.
Podría decir muchas cosas, pero creo que lo que más me define en este momento es que me aburro de todo, menos de las historias de los demás.
Siempre quiero saber(te).
Vos, ¿Quién sos?
Por GINA PENELLI