Cada fin de semana, personal de la Dirección de Tránsito en conjunto con la Dirección de Control Urbano y Convivencia y agentes de la Unidad Regional IV realiza en distintos sectores de la ciudad controles vehiculares que incluyen alcoholemia. Esta medida se replicó durante la madrugada del miércoles en consonancia con los festejo por el Año Nuevo.
El personal de las distintas áreas a cargo del operativo estuvieron situados en distintos puntos estratégicos y lograron realizar un total de 90 test de medición de alcohol en sangre. De ellos, cuatro conductores arrojaron resultados positivos. Además se labraron nueve actas y se secuestraron tres motos.