«ALAS DE MARIPOSA»
Algunas nos sentimos distintas, profundamente diversas, no es que estemos orgullosas de eso, ni tan cómodas. Tampoco es desagradable. Es así.
Distintas porque nuestros deseos no son los habituales.
Distintas porque nos expresamos en otras formas.
Distintas porque quisiéramos ir a lugares donde otras no quieren ir.
No queremos ir a donde ellas van, las otras.
Tenemos planes que nos hacen felices y son diametralmente opuestos a los de las demás.
No sé, no sé, no sé cuántas seremos, si más, si menos, si empatamos en una competencia que no existe.
En los momentos de duda nos preguntamos si estamos equivocadas. ¿Las dudas tienen la razón?
Por una fracción de segundo nos tienta la idea de transformarnos en eso que no somos. Pero no, no sucede.
Es más fuerte la voz que nos dice que sigamos otro camino.
Como una mariposa veleidosa que en el vuelo cambia de dirección, dando la sensación que no sabe qué hace. Pero lo sabe, las alas de la mariposa son frágiles y dubitativas solamente si no están en movimiento.
Y ese es el secreto.
Por MARÍA ROSA INFANTE.
