Finalmente, luego de tanta espera, de una historia que ya lleva 4 años, de idas y vueltas, de marchas y contramarchas, en este miércoles 6 comenzaron las obras de la etapa final de la postergada remodelación de la Residencia «Avelino Lóttici».
Luego de tanta pena y tanto olvido, de dilaciones inexplicables, incluso de un largo tiempo de desidia donde el lugar quedó en manos del vandalismo, la empresa adjudicataria de este último tramo comenzó con el trabajo, que –si no median osbtáculos, de esos que tantas veces aparecieron de la nada- llevará a que los residentes, todavía y desde el comienzo de este disparate viviendo en una casa alquilada en la Cortada Falucho, en un plazo aproximado de 5 meses, vuelvan a ésa su casa de la que fueron despojados en aquél aciago mes de julio de 2014.
Cabe recordar que en ese momento se prometió que en 180 días volverían a la Residencia. Vale reiterar que pasaron 4 años. En ese primer momento, fue Gladys Marchisio quien dio la voz de alerta; a ella se plegó Antonio Luraschi, y luego la Comunidad toda, a través de sus representantes y sus entidades intermedias. Dos diferentes gestiones a novel nacional, dos diferentes gestiones a nivel local, muchas reuniones de unos y otros con unos y otros, una comisión de seguimiento que nunca bajó los brazos, muchas ilusiones perdidas y esperanzas renovadas, muchas mentiras y muchas promesas incumplidas.
En la tarde de este miércoles, el Concejal Alberto «Viru» Yualé, en este último tiempo gestor de los pasos para que por fin la obra se retome y se concluya, se mostró satisfecho, adelantando que una vez finalizado este último tramo, la Residencia mostrará un aspecto más amplio, más cómodo y más confortable para sus moradores. La dirección técnica de esta última etapa está en manos del Arquitecto de nuestra Ciudad Pablo Debouvry.
Que esta vez sea… Por favor, que esta vez sí, por fin, sea…