POTENCIAL MENTE
¿CÓMO GESTIONAR UN MOMENTO DIFÍCIL?
Socialmente estamos atravesando una situación compleja, inesperada, negativa, que nos atraviesa a todos sin excepción. Sumadas a este estado general existen situaciones individuales, tal vez diversas, tal vez comunes, pero particulares, porque “cada persona es un mundo” y las coordenadas subjetivas de cada uno dan el sello de experiencia única e irrepetible a los momentos que vivimos.
Teniendo en cuenta este contexto, hoy les propongo interiorizarnos en cómo los seres humanos procesamos los momentos y, sobre todo, los invito a aplicar algunas estrategias para alivianar aquellos complejos.
Según Paul Gilbert (2015), tenemos tres sistemas de regulación emocional, relacionados entre sí:
- Sistema de amenaza y defensa: busca detectar peligros y lograr la seguridad, mediante mecanismos de lucha, huida, etc.; activa el miedo, la ansiedad, la ira, el asco y segrega hormonas tales como adrenalina y cortisol.
- Sistema de logro: enfocado en conseguir metas, superar desafíos, competir. Para ello sentimos energía, entusiasmo, euforia; generamos dopamina.
- Sistema de calma: apunta al autocuidado, la empatía, los vínculos, calidez, amabilidad. Nos permite sentirnos en calma, confianza, seguridad. Aquí juegan su papel la oxitocina y las endorfinas.
Cuando se activa el primero, se desactivan los otros dos, pues lo prioritario es defender nuestra vida, sobrevivir. Esto podría explicar, por ejemplo, por qué algunas personas viven, con motivo de la pandemia, desde hace meses en un estado de alerta permanente, sin relajarse, dormir, disfrutar de otras cosas…
El segundo sistema, cuando se activa, bloquea al primero: nos hace seguir adelante, en pos de nuestros valores, dándole poco lugar a los peligros. Así, podemos entender la conducta de quienes salían a trabajar, aunque teóricamente no se pudiera en plena Fase 1, para conseguir dinero y satisfacer las necesidades básicas, aunque hubiera sanciones.
El tercer sistema es un regulador interno de los otros dos: nos permite aportar calma, tranquilidad y paz, y contribuye al restablecimiento del equilibrio emocional. Y en este punto ¡tenemos mucho por hacer!
Algunas recomendaciones para gestionar un momento difícil:
- Respirar conscientemente, de forma lenta y profunda, para calmar cuerpo y mente.
- Auto-instrucciones: hablarnos con voz tranquilizadora mentalmente. Si esto nos resulta difícil, imaginar la voz de un amigo o un familiar dándonos aliento.
- Buscar ser más compasivos con nosotros mismos, reconocer errores y aciertos propios sin juicios de valor.
- ¿Qué le dirías a un amigo que está pasando por una situación como la tuya? Ahora decítelo a vos mismo.
- Recordar a alguien que nos dio una mano en un momento difícil, visualizar esa situación y conectar con aquello que sentimos cuando recibimos esa ayuda.
- Pedir ayuda a otras personas: esto incluye a profesionales, además de amigos y familiares.
Por JIMENA MESTRE – Lic. en Psicología – Mat. 8309
Tratamiento de traumas, fobias, pánico.
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