Un curioso episodio se dio en la madrugada de este domingo. Todo comenzó cuando un vehículo Chevrolet Corsa, en el cual circulaban 7 adolescentes de unos de 17 años, esquivó un control de alcoholemia en el centro de la ciudad.
Este primer hecho, en el cual casi sale herido un inspector de tránsito, sumado a la circulación a alta velocidad del vehículo por las calles céntricas de la ciudad provocaron el alerta por parte de las autoridades policiales quienes comenzaron una persecución para poder detenerlo.
Las cosas se pusieron mal ya que los menores en ningún momento tuvieron intención de parar su marcha. Al contrario de ello, intentando escapar del procedimiento del Comando Radioeléctrico terminaron provocando un accidente que pudo haber tenido consecuencias graves.
El Corsa circulaba por calle Remedios de Escalada al 1700 seguido por patrulleros cuando otro vehículo policial (que venía por calle Roca), le cerró el paso ingresando unos metros contra mano. Al verse rodeado, el conductor menor de edad lejos de frenar y acatar el alto, aceleró y terminó chocando a la policía.
Como resultado del impacto un joven debió ser atendido por el servicio de emergencias y trasladado hacía el Hospital San Carlos mientras que los demás ocupantes del vehículo y los efectivos policiales involucrados en el accidente debieron recibir atención médica primaria en el lugar.
Imágen: Casilda Plus