Un primer llamado, el 23 de diciembre, lo alertó sobre una extraña situación. Un conocido lo llamó avisándole que la puerta delantera de su vivienda se encontraba abierta y que notaba la faltante de algunos elementos.
Ese primer episodio no recibió, tal vez, la necesaria importancia por parte del propietario. El mismo hizo volver a truncar la puerta de entrada con un conocido para evitar que vuelva a ocurrir un episodio similar pero lamentablemente esto no fue así.
Seguramente atentos a la ausencia del morador de la vivienda, los malvivientes aprovecharon la situación y volvieron para robar todavía más elementos. Según se pudo constatar, los elementos robados fueron un tv 43 pulgadas, una garrafa, un equipo de música y una bicicleta.
El damnificado, quien es el único habitante del lugar, volvió a Casilda hace apenas unos días por lo que la denuncia del hecho fue radicada recién este lunes.