En el cierre de la sesión de este jueves, el concejal German Zarantonello se refirió a la situación que atraviesa el Ejecutivo Municipal. Desde la mañana del miércoles, en los pasillos del Palacio Municipal y en las calles, comenzaron a circular rumores que dan cuenta de posibles pedidos de renuncias a funcionarios municipales, lo que habría generado numerosos cortocircuitos internos entre el intendente y sus más cercanos.
Ante el hermetismo que hay en torno a ello, el edil tomó la palabra y pidió que el Concejo mantenga un estado de sesión permanente y esté en alerta. “Necesitamos saber qué está pasando porque eso hace a la institucionalidad. Estamos en un momento complejo”, afirmó.
Zarantonello deslizó, también, que “desde ayer al mediodía –los funcionarios-, no nos atienden los teléfonos” y afirmó “estamos abiertos al dialogo pero no hay respuesta”.
Tomando una fuerte postura ante el tema, agregó: “tenemos una sola consigna que es respaldar al intendente municipal bajo cualquier consecuencia. En lo particular, no me voy a tener un segundo, si al intendente le provocaran un amotinamiento o golpe de fuerza dentro de su propia fuerza, en salir a denunciarlo públicamente y ante quien corresponda”.
Por último, buscó llevar tranquilidad a la población afirmando que “el Concejo está a la altura de las circunstancias” y pidió dejar las internas de lado porque “detrás nuestro hay nada más y nada menos que 40 mil casildenses que padecen un montón de problemas”.
A continuación, los Concejales Maroevich y Palanca se manifestaron en el mismo sentido, adhiriendo a cada palabra de Zarantonello. No estuvieron presentes la concejala Marisa Liberato, quien se encuentra fuera de la provincia, y Rosana Bonavera.
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