Tal lo programado, y dentro del marco de la “40° Fiesta Nacional de la Soja”, Soledad Pastorutti, colmada de emoción y profesionalismo, brindó un inolvidable recital en la noche de este domingo.
Allí, en su casa, y por más de dos horas, Soledad, La Sole cantó por casi dos horas en su querida Arequito. «Si pienso como persona, probablemente hoy no debería estar arriba de este escenario. Pero esta fiesta es de ustedes. Yo esta noche sólo pongo la voz», así se pronunció la querida artista ante la multitud estimada en 10.000 personas que llegó a verla al Ferroclub, refiriendo al trágico accidente de tránsito en el que perdió la vida Mariano, su primo hermano y ahijado. La gente le prodigó numerosas muestras de aliento y cariño.
Brillante como cada vez que sale a un escenario, la Sole recorrió todos sus clásicos, y recibió saludos de reconocidos artistas a través de las imágenes de una pantalla gigante, como Luciano Pereyra, Abel Pintos, Carlos Vives, Ricardo Mollo, Ale Sergi y Andrés Ciro Martínez, entre otros.
Una artista de verdad, tanto por su talento como por su profesionalismo y humildad, que la hacen merecedora del inmenso afecto que permanentemente le brinda su público.